Las estadísticas son alarmantes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que 1 de cada 5 niños son víctimas de violencia sexual, incluido el abuso sexual, y que esto afecta a niños de todas las edades, razas, clases sociales y religiones. Generalmente se da en entornos cercanos y de confianza, es decir, con tíos, abuelos, primos mayores, profesores, sacerdotes, vecinos o amigos de los padres.
Sabemos que como padres no es fácil abordar este tema con nuestros hijos cuando son muy pequeños, porque tenemos miedo a sexualizarlos a muy temprana edad, a pervertir su infancia, a inculcarles la desconfianza en los mayores, y, en resumen, a presentarles la idea de que el peligro puede estar cerca, cuando lo único que queremos es proteger su inocencia e infancia, criándolos en base a la confianza, el amor y la seguridad.
Pero, aunque suene cliché, la frase «más vale prevenir que lamentar», en este caso es la gran clave. ¿Por qué? Porque los abusos pueden cometerse a cualquier edad, y porque, si los niños no saben de antemano qué es lo que está permitido que otras personas hagan con su cuerpo, jamás lo verán como un acto abusivo, y será mucho más fácil que el abusador los someta por períodos prolongados a esta violencia tan dañina.
En cambio, un niño que sabe qué es lo que es normal y qué no, estará más alerta y ante un eventual abuso, lo reconocerá rápidamente y podrá negarse, incomodarse o molestarse frente a este hecho, y comunicarlo a sus seres de confianza a tiempo, o al menos impedir que el abusador cometa el abuso. La mayoría de los abusadores actúa en base a la confianza que tiene con el niño, aprovechándose de su inocencia e ignorancia frente al tema.
¿Cómo tratar directamente estos temas tan complicados, sin ser tan explícitos? ¿Cómo llegar a la sensibilidad de nuestros hijos y hacerlos entender qué está bien y qué mal respecto a sus cuerpos, sin violentarlos con el lenguaje? ¿Cómo lograr que interioricen el tema del abuso y que sepan que es tan malo como el maltrato físico o sicológico?
Una buena forma de hacerlo es a través de cuentos infantiles creados por psicólogas especialistas, que enseñan el tema mediante un lenguaje directo y sencillo, acompañado de lindas ilustraciones que potencian el contenido y captan rápidamente la atención de los menores. Aquí les dejamos algunas recomendaciones para diferentes edades.
1. Kiko y la Mano: para niños pequeños
Kiko es un personaje que llega para combatir la violencia sexual contra los niños con una regla importantísima basada en tres ideas fundamentales: su cuerpo le pertenece sólo a él, existen secretos buenos y malos, y formas de tocar buenas y malas.
Los personajes son dos: Kiko y una mano, y la historia se basa en los tipos de contactos que van teniendo ambos, evidenciando así los que están permitidos y los que no, de forma clara y directa.
Aquí pueden leer el cuento
2. Ojos Verdes: para niños entre 6 y 12 años
Este libro de la psicóloga española Luisa Fernanda Yágüez, cuenta la historia sobre un niño y su vecino adulto, y la relación secreta que mantienen.
Todo empieza cuando Alex, el niño, va en búsqueda de su pelota perdida y llega a una gran casa con un jardín maravilloso y se encuentra con Max, el entrenador de básquetbol del colegio, que resulta ser su vecino. Max le ofrece enseñarle a jardinear, siempre y cuando fuese un secreto. Y, al ser un conocido, Alex no ve el riesgo en esto y se somete a esta relación que termina en abuso. Por ende, el libro enseña que no se puede mantener secretos con adultos, aunque sean personas conocidas.
Aquí les dejamos el link del cuento.
3. ¡Estela grita muy fuerte!: a partir de 6 años
Este libro busca entregar a los niños una herramienta para enseñarles a hacerse respetar, para prevenir así tanto el maltrato como el abuso infantil. «Una excusa para que niños y niñas, y mayores, entablen un diálogo sobre el derecho de cualquier persona a decir no ante situaciones que nos disgustan o hacen daño», señala Isabel Olid, autora del cuento.
El libro muestra a la protagonista Estela, una niña pequeña, en dos escenarios diferentes que involucran maltrato o abuso con personas cercanas: el primero es sobre maltrato físico con su mejor amiga del colegio y el segundo sobre abuso sexual con un tío.
Les dejamos el link del cuento en PDF
4. Cata y Benja: para todas las edades
El gobierno chileno, a través del Ministerio de Justicia, el año 2012 publicó tres libros como guía básica de prevención del abuso sexual infantil:
Cata, Benja y su Hada Madrina es el primer libro, destinado a niños menores de seis años, que enseña los límites de las demostraciones de cariño de una persona de confianza, representada por un hada madrina.
Cata, Benja y Pincho es el libro destinado a niños entre 6 y 12 años, y explica a través de un amigo, lo que significa directamente el abuso sexual, por qué es malo, y que nadie puede tocarlos de manera indebida, incluidas las personas de confianza como: tíos, primos, abuelos, vecinos, etc. Enseña que no deben existir secretos con adultos y que siempre deben contarle a sus padres aquello que les molesta.
Cata y Benja online es el último libro destinado a adolescentes y que explica los abusos que se pueden cometer a través de internet y cómo evitar exponerse de forma online ante desconocidos. La historia está basada en la conversación por el chat de Facebook entre dos amigos, quienes van exponiendo lo peligroso que es entablar relaciones con personas desconocidas a través de internet, explicándolo mediante lenguaje juvenil y casos puntuales que supuestamente le pasaron a otros amigos cercanos.
Aquí pueden leer los tres libros.